El gobierno local de Benidorm ha aparcado definitivamente su promesa de instalar un sistema para controlar la asistencia y el cumplimiento de horarios de la plantilla municipal, del que sí disponen otros municipios vecinos, como por ejemplo l'Alfàs del Pi. Así lo afirmó ayer la edil de Recursos Humanos y Hacienda, Natalia Guijarro, en respuesta a una solicitud del edil no adscrito, Juan Ángel Ferrer.
El exsocialista recordó que la aplicación de este tipo de controles para mejorar la eficacia de los funcionarios públicos figura como una de las principales recomendaciones efectuadas al Ayuntamiento por parte de la Sindicatura de Cuentas, quien en dos informes publicados en diciembre de 2012 y a primeros de este año, alertó del descontrol detectado en este apartado y aconsejó la aplicación de medidas para poner freno al absentismo laboral.
Frente a esta solicitud, la edil de Recursos Humanos, Natalia Guijarro (PSOE), afirmó que, pese a haber evaluado hasta la fecha varios sistemas, estos han acabado por ser descartados, bien por considerar que tendrían poca eficacia para controlar la presencia real de los empleados públicos en sus puestos de trabajo, bien porque su coste era «demasiado elevado». Guijarro explicó que, en función del sistema elegido y del número de dependencias municipales en los que se instalaran –Ayuntamiento, Casa del Fester, centros sociales u otras extensiones municipales–, los costes podrían oscilar entre los 20.000 y los 100.000 euros.
Al margen de esta solicitud, Ferrer también lamentó ayer que el Ayuntamiento haya desobedecido a la Sindicatura de Cuentas en otros aspectos para mejorar la organización del área de Personal, entre ellos establecer una fecha fija de cierre y pago de la nómina, incluir en la web municipal la oferta de empleo público o disponer de un organigrama claro de cuáles son las tareas asignadas a cada funcionario.
Fuente: diarioinformacion.com
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