viernes, 13 de junio de 2014

Ciclista encuentra a un hombre enganchado durante dos días a una raíz de un pino en la partida de Xirles

«¡Help, help, help!» era el grito de socorro del holandés, de 65 años, que fue rescatado el miércoles después de quedarse atrapado por la pierna en una raíz de un pino de un barranco situado entre Polop y Xirles. Una llamada de auxilio que, cada vez que la recuerda, todavía estremece a Juan Ramón Mercado, el ciclista polopino que se encontró a este hombre enganchado boca abajo y que ayudó a Bomberos y a Guardia Civil a liberarlo.
Y es que, para Mercado, lo que vivió el pasado miércoles por la tarde fue «una de las experiencias más impactantes que he tenido en mi vida». Todo empezó cuando, junto a un compañero, recorría en bici una pequeña senda en esta partida rural del término municipal de Polop. «De repente, escuchamos ruidos de gente, entre los que se distinguía a alguien pidiendo auxilio. Entonces, en un barranco cercano vimos a un hombre que trataba de auxiliar a otro que colgaba, a unos 3 ó 4 metros del suelo, ya que se había quedado enganchado por la rodilla en una raíz incrustada en la pared del barranco», rememora este ciclista.
La imagen, según dice, era «terrorífica». Tanto que su compañero, mucho más joven (él tiene 39 años), se quedó muy impactado y no pudo ni acercarse. «Tenía el brazo hinchado y la boca morada. Estaba mal, muy mal. Su rodilla se encontraba atrapada justo en un agujero de la raíz. Yo creo que se la debió partir. La imagen era muy dura. Pero es de estas veces que no piensas y el propio instinto te lleva a ayudar, casi sin ser ni siquiera consciente», rememora el joven.
La persona que acompañaba al holandés en ese momento, que al parecer era el que se lo había encontrado primero, según Mercado, era mayor, y no podía hacer nada por la víctima. «Además, el afectado era corpulento, mediría algo más de 1,85», matiza. De hecho, él intentó agarrarlo y subirlo hacia arriba pero pesaba demasiado. «Le traté de decir que se relajara, que iba a llamar a una ambulancia. Contacté con mi pareja y le dije que avisara a la Policía, a los Bomberos y a lo que hiciera falta. El hombre no me entendía, porque no hablaba español y yo tampoco tengo ni idea de holandés. Yo simplemente le decía: "Ambulancia, ambulancia, tranquilo, ambulancia"», relata.
«Cuando llegó la Guardia Civil y los Bomberos, decidimos cortar la rama para bajarlo. Estuvimos media hora para desengancharlo entre ocho. Cuando lo tendimos en la camilla no paraba de gritar, ya que por lo visto tenía muchas lesiones», explica Juan Ramón Mercado.
También recuerda que el hombre mayor que estaba allí les comentó que, según lo poco que había podido hablar con el holandés, se había pasado dos días atrapado, lo que confirmaría la versión del Consorcio de Bomberos.

El rescatado fue evacuado en helicóptero al Hospital de la Marina Baixa de La Vila Joiosa, donde sigue ingresado en la Unidad de Cuidados Intensivos (UCI). El pronóstico continúa siendo reservado. Según pudo saber este diario por fuentes cercanas al caso, ayer fue intervenido y, al parecer, el resultado fue positivo. No obstante, fuentes sanitarias aseguraron que las 48 próximas horas van a ser fundamentales para su evolución.
Lo que todavía se desconoce es la razón que llevó a este holandés a esta zona rural y las causas de su caída por un barranco de más de doce metros de altura. Este periódico sólo pudo saber ayer que entre sus pertenencias había un ticket del Hotel Presidente de Benidorm. Personal de este establecimiento turístico precisó a este diario que este señor tenía una reserva hecha pero que todavía no había acudido a sus instalaciones.
Cabe recordar que, a las 19.30 horas del miércoles, el parque de Bomberos de Benidorm recibió el aviso de que había una persona atrapada en una raíz de un árbol en una partida de Xirles. Hasta allí se desplazaron dos coches con cuatro bomberos, además de varios efectivos de la Guardia Civil y un helicóptero del Consorcio de San Vicente del Raspeig, así como un Soporte Vital Básico. Alrededor de las nueve de la noche el rescate ya se había efectuado con éxito.
Lo más sorprendente es que este holandés hubiera podido resistir dos días boca abajo, información que ofreció el Consorcio de Bomberos y que, al parecer, confirma la versión del ciclista. Fuentes cercanas al caso señalaron que ese dato era bastante extraño: «Una persona al estar dos días en esa posición se habría muerto».

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