lunes, 23 de junio de 2014

Agustín Navarro: «Voy a volver a ser el candidato a la Alcaldía en 2015»


Encara el último año de esta legislatura consciente de que la situación de las arcas públicas apenas deja margen para invertir en la ciudad. Sin embargo, Agustín Navarro (Benidorm, 1961) anuncia que volverá a ser el candidato del PSOE a la Alcaldía en las próximas municipales: «Si he gestionado los tiempos más difíciles, también quiero hacerlo cuando económicamente haya alegría». Para ello, no le importaría volver a pactar con Gema Amor o «con cualquier partido menos con el PP», incluso con el edil que abandonó en febrero de 2013 el redil socialista para ser no adscrito, Juan Ángel Ferrer.

Aunque es alcalde desde 2009 –cuando firmó con Bañuls la segunda moción de censura de la ciudad–, hace poco acaban de cumplirse tres años desde que ganó la Alcaldía por medio de unas elecciones. ¿Qué balance hace de su gestión en estos años?
La ciudad funciona, tenemos más ocupación que nunca y estamos saliendo mejor que nadie de la crisis. Aunque quedan muchas cosas por hacer, se puede decir que el balance es muy positivo, pero no lo será del todo mientras haya tantas personas sin un empleo. Funciona por la estabilidad que tiene ahora la ciudad. Yo fui alcalde durante un año en minoría y había muchas cosas que costaba sacar adelante, pero tras el pacto con los liberales de Gema Amor hemos dado estabilidad a Benidorm y ahora va todo rodado, estamos atrayendo nuevos proyectos y no hemos dejado de prestar ningún servicio.

Sin embargo, en sus inicios, un día sí y otro también tenía trabajadores protestando ante el Ayuntamiento y amenazas de huelga por impagos a las concesionarias. 
Es una de las cosas más duras a las que nos hemos tenido que enfrentar, sobre todo el anterior equipo de gobierno, pero hablamos y mediamos con todo el mundo y se logró que al final no hubiera huelgas. Ahora, con el plan de pago a proveedores del Gobierno central, hemos puesto al día la deuda con estas empresas y, lo que es más importante, no estamos generando más deuda, como sí está pasando en otros municipios.

Da la sensación, no obstante, que este nuevo rumbo económico no ha servido para abordar las obras que Benidorm necesita para ponerse al día. Recordemos que las farolas de la avenida Mediterráneo son las mismas desde hace más de 40 años.
Para esas cosas no ha habido dinero. Y ahora tampoco tenemos para invertir. Hay una importante carencia en el mantenimiento de la ciudad y, aunque sí va a haber fondos para pequeñas inversiones, no tenemos 3 millones de euros para arreglar Jaime I o la avenida Mediterráneo. Si este Ayuntamiento en la etapa del PP hubiera destinado a estos proyectos el sobrecoste del Palau o el del Ayuntamiento, cuando se ataban los perros con longanizas, la ciudad no estaría tan vieja. Ahora sabemos que toca arreglarla, pero no podemos.

Imagino que otra de las cuestiones que más le ha traído de cabeza es la querella de ParkControl. ¿Su archivo allana el camino de Agustín Navarro de cara a las municipales de 2015?
Yo nunca he tenido dudas en este aspecto. Tenía la inquietud jurídica pero no la política. Y ahora estoy seguro de que voy a volver a ser el ser candidato en 2015. Cuento con el apoyo de Ximo Puig y los estatutos del PSOE recogen que los alcaldes imputados por causas administrativas, que no por corrupción, pueden ir en las listas. Tengo muchísima ilusión, soy el político local más valorado en los sondeos y me siento más fuerte que nunca.

¿Y si hay primarias?
Los estatutos del partido también dicen que en las ciudades que hay alcalde no va a haber primarias. Directamente el alcalde tiene que ser el candidato.

Teniéndolo tan claro, habrá empezado a pensar ya en la lista...
De eso aún hay nada. Bueno, tengo clara sólo una cosa: voy a exigir, o sugerir, al partido que quien vaya en la lista para ser concejal tenga una dedicación exclusiva, las veinticuatro horas, a Benidorm.

Aún tiene otra imputación por presunta prevaricación, tráfico de influencias y malversación de caudales por los contratos y la gestión del área de Personal en el Ayuntamiento durante los años 2010 y 2011.
Estoy seguro de que eso también quedará en agua de borrajas porque es un tema puramente administrativo. No hay nada de lo que se dice. Si yo no hubiera levantado reparos, ¿qué hago? ¿Dejo de pagar a los funcionarios?

Comprenderá que haya gente que no piensa igual...
Yo ya fui a las elecciones de 2011 imputado y las gané. Lo único que pido a los vecinos es que, cuando vean mi nombre en los carteles del PSOE, sepan distinguir entre unas imputaciones y otras. Yo no he metido la mano y eso se puede demostrar. Ahora bien, entiendo que el archivo de esta querella haya dejado en fuera de juego al Partido Popular y también a algunos de mi partido.

Pero sí que ha estado año y medio cobrando de más, como desveló el Síndic de Cuentas.
Eso lo he explicado muchas veces. Cuando se aprobó el sueldo los técnicos dijeron que no sabían cómo aplicarlo y hasta que el Síndic vino, sólo me habían rebajado una parte, el 15% de todos los concejales. Entonces es cuando pedí que me lo quitaran todo. Y ahora, con el último acuerdo plenario se ha rectificado, se ha hecho justicia poniéndome un sueldo acorde al cargo de alcalde, y estoy empezando a devolver el dinero. Y, por cierto, los 54.000 euros que tengo ahora de sueldo al año son dos mil menos al mes de lo que cobraba el anterior alcalde del PP, Manuel Pérez Fenoll.

El asunto, como otras cuestiones relativas a los gastos en Personal, lo está investigando el Tribunal de Cuentas. 
Insisto en que se llegó ahí por una aplicación errónea del acuerdo plenario y yo tengo las espaldas cubiertas, porque ahí están los escritos donde pido muchas veces a los técnicos que me lo solucionen. Y como con este tema, pasa con el resto de irregularidades entre comillas que dijo la Sindicatura.

Dice que hay gente de su partido que se ha quedado fuera de juego por el archivo de una de sus imputaciones. ¿Acaso se siente cuestionado por los socialistas de Benidorm?
No, no, de ningún modo. El partido está unido y vamos todos a una, pero individualmente imagino que sí que habría quien podía pensar «bueno, como Navarro está imputado...».

No obstante, sí que hay sectores del PSOE descontentos con la gestión que está llevando a cabo, porque creen que, tras el acuerdo con Gema Amor, su gobierno ha perdido la esencia socialista, por ejemplo, privatizando servicios como el Palau d'Esports.
Eso nos lo han dicho en asambleas, en la ejecutiva y reconozco que en el propio grupo municipal también se ha abierto el debate. Pero también hay que entender que mejor perder un 30% de ideología y estar en el gobierno, que el cien por cien en la oposición. Con un pacto CDL-PP no se habría hecho el aumento de becas, de ayudas al Doble Amor,... Nosotros llevamos las concejalías progresistas y ahí estamos haciendo todo lo que podemos.

Y también concesiones. 
Claro que hay que hacer concesiones. En un pacto es lógico, pero creo que vale la pena si a cambio puedes desarrollar otras políticas progresistas y no estar viéndolas venir desde la oposición, donde uno no puede hacer nada.

Llama la atención, por ejemplo, que con lo que le ha costado a Benidorm tener un museo ahora el Ayuntamiento tenga previsto también privatizarlo. 
Eso se hace por dos cosas. Primero, porque para vestir ese museo necesitamos 800.000 euros y, además, porque para abrirlo hacen falta diez contrataciones, que el Ayuntamiento no puede hacer, el Gobierno no nos dejaría nunca porque no es un servicio prioritario. No podemos endeudarnos por contratar a más personal. Aún así, lo que se está privatizando es un museo, que aunque lo tuviera el Ayuntamiento cobraría también entrada, o sea, que no es tan grave. Nosotros participaremos de los beneficios y controlaremos la gestión, pero esto no tiene nada que ver con el pacto con los liberales.

Entiendo por lo que dice que, llegado el caso, volvería a pactar con Gema Amor. 
Yo estoy muy contento con este pacto, que además refrendó la ejecutiva y la asamblea del PSOE. Claro que volvería a pactar con ella y con cualquier otro partido de izquierdas si el PSOE me autorizara. El único pacto que no haría es el de concentración PSOE-PP, pero sí con cualquier otra opción si necesitáramos estabilidad.

¿Y con Juan Ángel Ferrer?
Si fuera por Benidorm, también. Pero habría que ver lo que él pide.

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