martes, 8 de abril de 2014

Fomento acaba y abre la variante de Benidorm, los ocho primeros kilómetros de autovía gratuita de La Marina

Mucho antes de lo previsto, la empresa que construye la variante de Benidorm en la N-332 ha concluido prácticamente las obras y desde este lunes ya están abiertos los dos carriles por dirección con la rodadura definitiva entre el centro comercial de Finestrat y la entrada a la ciudad desde la AP-7, ocho kilómetros que se convierten así en los primeros de autovía gratuita de las dos comarcas de La Marina, ya que, hasta ahora, entre Xeresa y El Campello la carretera nacional se recorría circulando sobre un carril por cada dirección.
Las obras de este tramos han durado la friolera de cinco años. Se iniciaron en 2009 con un presupuesto de 36 millones y un plazo de ejecución de 34 meses. Aquel proyecto contemplaba su inauguración hace dos años, pero los sucesivos recortes del Ministerio de Fomento prolongaron las obras hasta septiembre de este año.
De hecho, los Presupuestos Generales del Estado aprobados a finales de 2013 contemplaban para este año una inversión de 4,2 millones de euros, otros 3,5 el año que viene, un millón en 2016 y 300.000 euros en 2017, lo que hizo temer lo peor, aunque fuentes ministeriales siempre habían defendido que esa distribución de la inversión se hacía exclusivamente a los efectos del pago de las certificaciones de obra, que no tenían porqué coincidir con su ejecución.
Finalmente, un insólito y no previsto acelerón de las obras -han llegado a estar trabajando decenas de operarios en diferentes puntos de su trayecto- ha posibilitado que esta más que necesaria ampliación de la capacidad de la N-332 a su paso por Benidorm esté abierta antes incluso de la Semana Santa de 2014, lo que evitará las habituales retenciones de esta carretera en uno de los momentos de mayor entrada de vehículos.
De la premura de Fomento y las prisas que se ha dado la UTE que realiza las obras da fe el hecho de que a finales del año pasado una moción de la senadora socialista Encarna Llinares para que la variante concluyera esta misma anualidad se convirtió en una enmienda transaccional del PP que recogió el compromiso de que los trabajos estarían concluidos a finales de 2014. Sin embargo, se han acabado con al menos seis meses de antelación sobre el plazo al que, en la práctica, se comprometió el Gobierno en la Cámara Alta.

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