miércoles, 16 de abril de 2014

Las presas de Guadalest y Amadorio vierten al mar el agua que gasta Benidorm en un año

Los embalses de Guadalest y Amadorio, en la Marina Baixa, vertieron al mar en el último trimestre de 2013 cerca de cerca de 9 hectómetros cúbicos –2,7 en el de Guadalest y 6,2 en el de Amadorio–, una cantidad equivalente a lo que consume una ciudad como Benidorm a lo largo de todo un año. El desaprovechamiento de caudales se produjo en cumplimiento de las normas de explotación de las presas de dichos embalses, aprobadas en el año 1999 por igual para toda la cuenca y que obligan a reducir la capacidad de los pantanos ante un posible riesgo de gota fría.
Ahora bien, la situación prácticamente de sequía por la que atraviesa en la actualidad la provincia, con el ciclo con menos lluvias de los últimos catorce años, ha obligado ahora al Consorcio de Aguas de la Marina Baixa a activar los pozos de reserva del Algar y Beniardá para contrarrestar la disminución de agua embalsada en ambos pantanos. De hecho, ambas infraestructuras actualmente tienen 13,3 hectómetros cúbicos almacenados, un 39% menos de caudales que en estas fechas de 2013 y algo menos de la mitad de su capacidad, un hecho que contrasta con la ingente cantidad de litros que el pasado otoño se tiraron al mar y que ahora habrían permitido mantener intactas las reservas.
Ante esta situación, el gobierno local de Benidorm llevará al próximo pleno del Ayuntamiento una moción para reclamar a la Confederación Hidrográfica del Júcar (CHJ) mejoras en el aprovechamiento hídrico de los dos embalses de la comarca. Entre las medidas reclamadas por el Consistorio, el concejal de Ciclo Hídrico, José Marcet (PSOE), explicó que la principal reivindicación es que la CHJ adapte los protocolos de desembalse a las características pluviométricas e hídricas de cada pantano, en lugar de mantener una «normativa lineal». El edil manifestó que «las características del embalse del Amadorio no son iguales que las de Guadalest», puesto que el primero «apenas se llena de agua de lluvia, sino de la que se bombea desde el río Algar» por lo que a su juicio «no sería necesario que se desembalsara tanta agua como en el de Guadalest» cuando llega la época de lluvias.
Además, el concejal alegó que en la actualidad «existen sistemas de predicción muy detallada» que también se podrían adoptar para aumentar la capacidad de los embalses, evitando abrir las compuertas de los pantanos y que el agua se pierda en el mar. Por eso, en la moción se insta a la CHJ a que «estudie, proyecte y ejecute las obras e instalaciones necesarias» en los dos pantanos de la comarca y en todas las instalaciones complementarias para «aumentar significativamente su capacidad de embalsamiento y minimizar las necesidades de desembalse y pérdidas de agua aprovechable».
Frente comarcal
El edil de Agua de Benidorm afirmó ayer que, aunque en la actualidad no en absoluto riesgo de desabastecimiento, el malestar existente por el elevado vertido de agua al mar el pasado otoño no es exclusivo de Benidorm. Según Marcet, otros municipios de la Marina Baixa, como La Vila Joiosa, también trasladaron sus quejas a la CHJ en la última reunión del Consorcio. Por ello, el Ayuntamiento de Benidorm pretende que esta reivindicación se extienda a todos los plenos municipales de la comarca para hacer un frente común. «No se puede luchar e invertir permanentemente en optimizar el aprovechamiento de los recursos hídricos, mientras que por un tecnicismo legal se pierden todos esos esfuerzos en el mar», concluyó el concejal.

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