Tienen fecha, tienen cartel, pero carecen aún de una ubicación definitiva para poder reunir el primer fin de semana de agosto a miles de amantes de la música electrónica. La obligación de abandonar el aparcamiento de Terra Mítica, debido a las denuncias de varios hoteles de la zona por el exceso de ruido registrado en la edición de 2013, ha llevado a los promotores del festival Electrobeach a solicitar al Ayuntamiento de Benidorm la cesión de parte de las instalaciones del recinto deportivo Guillermo Amor, en Foietes, para poder celebrar allí su evento. Así lo confirmaron ayer desde la organización, que consideraron que, como ocurre con el Low Festival, el Consistorio tampoco debería poner ningún impedimento para la celebración en este recinto del Electrobeach, organizado mayoritariamente por empresarios de ocio de la ciudad.
La promotora ha registrado en el Ayuntamiento formalmente una solicitud para poder ubicar su montaje en la pista de atletismo de Foietes y en otras zonas de este recinto deportivo, dejando al margen el campo de fútbol, que sí se emplea, por ejemplo en el certamen de música independiente. Y no se quedan ahí. Porque además, los promotores del Electrobeach se comprometen ante el Consistorio arespetar «los mismos horarios, los mismos niveles de sonido y las mismas condiciones que se impongan al Low». Además, también se ofrecen a regenerar el césped que se vea dañado por el público que acuda u otro tipo de daños, cuyos arreglos, con el otro festival, corren por cuenta de las arcas públicas, y «sin pedir ningún tipo de contraprestación» económica, aseguraron.
Entre los motivos que han llevado al Electrobeach a solicitar esta cesión, hay tres que destacan por encima de todos. El primero, que aunque la opción de hacer el festival en el polígono industrial aún está sobre la mesa, «consideramos que Foietes es el espacio que mejor se adapta para dar una buena oferta». El segundo, que el Low Festival se celebra del 25 al 27 de julio y el Electrobeach, el 1 y 2 de agosto, es decir, sólo una semana después, por lo que «podrían aprovecharse muchas de las infraestructuras para los dos festivales y se ahorrarían muchos costes». Por último y más importante, otras fuentes señalaron que, de no cerrar un espacio definitivo, el festival podría echarse al traste y acabar por no celebrarse, pese a tener ya a 21 artistas confirmados, con las consiguientes pérdidas económicas que ello podría generar a la organización.
El alcalde no lo ve claro
El alcalde de Benidorm, Agustín Navarro, reconoció tener sobre la mesa la petición del Electrobeach pero dijo que el equipo de gobierno «aún lo ha estudiado». En cualquier caso, avanzó que, a su juicio, «es complicado que se pueda celebrar allí, porque es una música distinta a la del Low y puede causar muchas molestias a los vecinos».
Fuente: diarioinformacion.com
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