Agentes de la Policía Nacional detuvieron en Burgos y en Benidorm a los cuatro responsables de un portal de apuestas deportivas online, miembros de una misma familia, como presuntos autores de estafas que afectaron a más de 400 personas, por importe cercano al medio millón de euros. Según informaron desde la Subdelegación del Gobierno en Burgos, la web cesó su actividad de forma inesperada y sin previo aviso a los usuarios registrados, apropiándose del dinero que los jugadores tenían depositado. Esta operación es la primera realizada en España contra un portal online ilegal de apuestas deportivas.
La investigación se inició tras recibirse una serie de denuncias interpuestas por una asociación de víctimas del fraude del juego online, en representación de 21 usuarios, que pusieron de manifiesto ciertas actividades ilícitas de una casa de apuestas deportivas que operaba a través de internet.
Los detenidos operaban a través de una empresa ficticia que inscribieron en registros españoles oficiales aportando documentación falsa. Paralelamente contrataron servicios con intermediarios financieros internacionales y con entidades bancarias españolas. Parte de la investigación se ha desarrollado en Suiza y Polonia, países en los que se ubicaban las empresas legales con las que la web tenía contratadas las plataformas de juego online y que daban soporte a esta casa de apuestas deportivas. Gracias a su colaboración se han podido obtener datos técnicos concluyentes para la investigación.La web llevó a cabo su actividad comercial durante un año, entre junio de 2011 y el mismo mes de 2012, fecha en la que la plataforma desapareció de la red apropiándose del dinero que los jugadores tenían depositado y sin que los usuarios, que reclamaban reiteradamente el reintegro de sus beneficios, lograran su devolución. Durante su etapa comercial más de 4.000 usuarios de todo el mundo hicieron uso de este portal de apuestas, realizando transacciones por valor de 7,5 millones de euros.
La captación inicial de clientes se realizaba mediante una estrategia comercial agresiva y muy atractiva para los jugadores. Al parecer, ofrecían “bonos de bienvenida” que permitían a los nuevos usuarios disponer de hasta 1.000 euros de saldo en su cuenta. La práctica comercial y las denuncias de varios usuarios pusieron de manifiesto que en muchos casos, estas promociones eran sólo un señuelo que el jugador nunca llegaría a retirar.
La investigación ha sido desarrollada por agentes de la Unidad de Investigación Tecnológica de la Comisaría General de Policía Judicial y ha contado con la colaboración de las jefaturas superiores de Policía de Madrid y de la Comunidad Valenciana, las comisarías provinciales de Alicate, Córdoba y Burgos, y de las comisarías locales de Calatayud, Aranda de Duero, Mataró, Vigo, Ponferrada, Úbeda, Oviedo, Ibiza y Benidorm.
Fuente: elnortedecastilla.es
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