miércoles, 28 de enero de 2015

El Supremo ratifica la multa de 3,8 millones por la infracción urbanística del Atrium

Hotel Luna SA, la empresa promotora del hotel que estaba llamado a convertirse en el más grande de Europa, el Atrium Beach, tendrá que pagar 3,8 millones de sanción por la infracción urbanística cometida a principios de la década del año 2000 en la primera línea de La Cala de La Vila Joiosa. Así lo ha ratificado el Tribunal Supremo, en una sentencia en la que estima parcialmente el recurso presentado por la mercantil contra dicha sanción, pero no la perdona de tener que hacer frente a los 3.832.858,74 euros de multa que le impuso el Tribunal Superior de Justicia (TSJ) de la Comunidad Valenciana en julio del año 2012 por construir parte del complejo hotelero «sin licencia».

Los hechos se remontan a hace ahora una década, cuando la Generalitat Valenciana impuso en mayo de 2005 una sanción de 12 millones de euros a la mercantil por exceder la edificabilidad del proyecto para el que había obtenido los permisos. En concreto, el Ayuntamiento de La Vila autorizó la construcción de un establecimiento hotelero de 11 plantas, aunque Hotel Luna SA acabó levantando 22, lo que según los informes técnicos elaborados en su día por los técnicos municipales, desembocó en cerca de 53.000 metros cuadrados de edificación por encima de la superficie legal.

Aquella multa de 12 millones, la mayor impuesta en la historia del urbanismo valenciano y que el entonces conseller de Territorio, Rafael Blasco, calificó como un «ejemplo de tolerancia cero contra los abusos urbanísticos», fue anulada inicialmente por el TSJ en 2008, alegando la caducidad del expediente por errores de forma en la notificación. La decisión, no obstante, fue revocada después por el Supremo y desembocó en una nueva sentencia del TSJ –la antes aludida de julio de 2012– en la que el tribunal reducía de 12 a 3,8 millones la multa.

Entre las causas de la rebaja, la sala de lo Contencioso Administrativo del TSJ atendió al valor de la obra construida de más hasta el momento de paralización de los trabajos, en 2003, y no al presupuestado para la obra acabada, como se calculó por el Consell.

Pese a la ostensible disminución de la sanción, la mercantil volvió a presentar un recurso de casación ante el Supremo, en cuya sentencia, que ya es firme, el alto tribunal tan sólo atiende uno de los once argumentos de Hotel Luna SA, ratifica que parte de las obras se levantaron «sin licencia» y que las mismas son «ilegalizables», por lo que cree «legítima» la sanción de 3,8 millones impuesta por el TSJ.

El alcalde de La Vila Joiosa, el popular Jaime Lloret, se mostró ayer «satisfecho» con el fallo del Supremo y confió en que el Ayuntamiento pueda cobrar «en pocos meses» estos 3,8 millones para destinarlos a inversiones. Lloret recordó que el dinero se encuentra en depósito judicial por parte de la empresa y, por tanto, avanzó que pedirán cuanto antes la ejecución de la sentencia para ingresar la suma. Por su parte, fuentes de Hotel Luna anunciaron que solicitarán al Supremo una aclaración de la sentencia, dado que consideran que es «confusa» y, a su juicio, presenta contradicciones.

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