Cada día me sorprende más el afán de notoriedad de algunos. Más aún cuando hablamos o, en este caso, escribimos, sobre política. En esta ocasión, el alcalde de Benidorm, Agustín Navarro, recalcaba en el día de hoy el potencial de nuestra ciudad para albergar eventos deportivos. Todo ello a raíz de que, el Estadio Municipal 'Guillermo Amor' de Benidorm acogerá, a partir de la próxima semana, los encuentros del grupo primero de la Ronda Elite de Clasificación Sub-17 para el Campeonato Europeo, en el que se encuentran España, Suecia, Israel y Francia.
No es que el evento en sí, sea muy allá. Ni muy mediático. Pero al fin y al cabo es fútbol y tal vez, ello maquille un tanto el "triunfo" de Benidorm y del equipo de gobierno al albergar una campeonato Sub-17. Pero, volviendo al asunto de las declaraciones del alcalde, me avergüenza que realice tales afirmaciones cuando, al mirar a nuestros vecinos o, incluso, a nuestra ciudad vecina, La Nucía; la capacidad mencionada por Navarro queda desplomada.
Recordemos que la ciudad gobernada por Bernabé Cano y su equipo de gobierno ha sufrido un cambio de 360º grados durante el mandato de Cano. Ya tratábamos el tema con anterioridad, recordando la importancia del señor Bernabé para la ciudad y comarca, pero nunca está de más refrescar la memoria a políticos achacados con afán de protagonismo.
Ese pequeñito pueblo de hace diez años con poco más de nueve mil censados es a día de hoy una ciudad de más de veinte mil que, en base al deporte, han evolucionado y crecido conjuntamente, acogiendo eventos deportivos de renombre a la vez que galardones por el mérito, esfuerzo y resultados que ha conseguido La Nucía. Cosa que, Benidorm y su actual equipo de gobierno de socialistas, aunque con anterioridad, en agrupación con liberales; no ha recibido medalla alguna en el ámbito deportivo mientras que, La Nucía hará escasos días, enorgullecía a sus vecinos siendo sede de la XXXV Gala Nacional del deporte.
Son diferencias a la hora de gestionar y, sobre todo, de representar ya que, considero que la figura de un político es la simbolización de la ciudadanía y de la ciudad allá donde quiera que vaya. Es el producto de la constancia, dedicación y amor al pueblo de La Nucía contra el desdén, desfachatez y cinismo en Benidorm.
Rodrigo Quesada / @Quesadacid
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